¿Estamos listos para el cambio?
La serie animada “Los supersónicos” nos permitió imaginar, en nuestra infancia, un futuro donde la tecnología, incluyendo la inteligencia artificial (IA), tenía un papel esencial en la vida cotidiana. Desde la realización de tareas domésticas (Robotina) hasta relojes inteligentes, periódicos digitales, videollamadas, asistentes virtuales, casas inteligentes, y trabajo con solo apretar un botón. Ahora, la IA puede decirnos cómo serían los personajes de “Los supersónicos” si fuesen humanos, y hasta nos permitiría interactuar con ellos.
La inteligencia artificial (IA) ha dejado de ser parte del futuro para convertirse en una realidad tangible, presente en nuestra vida cotidiana. Influye en nuestras decisiones y simplifica nuestras tareas.
¿Mayordomos digitales?
Tener una Alexa en casa ya se ha convertido en una normalidad. Alexa, Siri, Google Assistant son como mayordomos digitales. Responden preguntas, controlan dispositivos y nos acompañan en nuestro día a día.
Por ejemplo, he formulado como ejercicio para este texto, una petición a Gemini, un modelo de inteligencia artificial (IA) de Google que está en desarrollo.
Aquí mi solicitud:
—“Hola, Gemini. Tuve un mal día. ¿Puedes decirme una frase que me haga sentir mejor? Como si fueses un amigo que intenta darme ánimos.”
La respuesta de Gemini fue la siguiente:
—“¡Hola! Entiendo que hayas tenido un mal día. A todos nos pasa. ¿Quieres que te diga algo para que te sientas mejor? Claro que sí, ¡para eso están los amigos!”
La aplicación agrega una serie de frases motivadoras, entre las cuales destaca:
“Si necesitas un abrazo virtual: «Un abrazo enorme para ti. Recuerda que no estás solo en esto. Estoy aquí para escucharte si lo necesitas.»
Y después de ofrecerme más expresiones inspiradoras, me pregunta:
—“¿Qué te parece si intentamos juntos encontrar algo que te saque una sonrisa?”
Es un ejercicio muy simple, pero demuestra cómo la IA es parte de nuestra vida, y está siempre aprendiendo. Cuanto más interactúa con nosotros, más aprende.
Recibimos recomendaciones de la IA: ¿Te has dado cuenta?
Seguramente usas plataformas como Netflix o Spotify. Estas utilizan algoritmos de Inteligencia Artificial para sugerirnos películas, series o canciones basadas en nuestros gustos y hábitos de consumo.
¿Usas redes sociales?
Pues los algoritmos de Inteligencia Artificial determinan qué contenido ves en tus redes sociales. Generan información personalizada que influye en lo que ves y en los temas de los cuales comentas. Incluso puede afectar en qué crees o no.
Pero eso no se detiene allí. La IA permite la automatización de muchas tareas repetitivas; adaptar el contenido educativo a las necesidades de los estudiantes para hacer el aprendizaje más personalizado. También crear contenido: textos, imágenes y videos; y muchas otras actividades más.
Pero, ¿qué es la Inteligencia artificial?
Le pedí a Gemini que definiera Inteligencia Artificial en términos que pudiese comprender cualquier persona; y me respondió: —“Imagina que la IA es como un supercerebro digital que aprende y se adapta como nosotros los humanos, pero a una velocidad mucho mayor”. Leyó bien: “nosotros los humanos”.
Entonces, imagine, mi querido lector, un supercerebro digital que aprende constantemente, a partir de grandes cantidades de información: libros, artículos, respuestas o preguntas de las personas con las cuales interactúa.
A medida que procesa dichos datos, aprende a reconocer patrones y resolver problemas. Exacto, a resolver problemas, comprender el lenguaje y razonar; pues, como dice Gemini, “la IA intenta imitar las capacidades cognitivas humanas”.
Así que la IA tiene aplicaciones infinitas en nuestra vida diaria. Solo piense en el asistente virtual de su teléfono.
Por supuesto, la Inteligencia Artificial también implica ciertos desafíos, sobre todo éticos, pero eso es asunto de otro texto. Por ahora, ni siquiera me sorprende cuando mi sobrino pregunta: —“Alexa, ¿qué día es hoy?”—, y la aplicación responde: —“Hoy es viernes y el cuerpo lo sabe”.
Comunicadora social. Doctora en Ciencias Humanas. Directora de la Escuela de Comunicación Social, ULA Táchira.