Es especialista en Ciencias Penales y Derecho Procesal Constitucional, profesor de Criminalística en la Universidad Central de Venezuela, Luis Izquiel.
El doctor Luis Izquiel, especialista en Ciencias Penales y Derecho Procesal Constitucional, profesor de Criminalística en la Universidad Central de Venezuela y coautor del libro La revolución de la muerte, afirma que la tasa de criminalidad en nuestro país es mayor que Colombia, Brasil y México.
Al ser entrevistado por El Impulso acerca del anuncio, hecho por el ministro Diosdado Cabello, en el sentido de que el gobierno acabará con las bandas delictivas el próximo año, su experiencia le lleva a no creer que se pueda concretar tal aspiración.
No parece factible esa posibilidad, menos en un país que tiene altas tasas de criminalidad y abundan las bandas delictivas — dice convencido. Pretende acabar con todas las bandas criminales es algo que luce, prácticamente, imposible.
Seguidamente indica que aquí hay que diferenciar las bandas de crímenes organizadas de las bandas de delincuentes comunes. Aquellas son pocas, pero, eso sí, más grandes en el número de sus integrantes y con mayor dominio de territorio . Y las otras son muchísimas y no se puede precisar cuántas son. con pocos integrantes, pero no dejan de ser peligrosas como las otras.
Con base a esa situación la oferta formulada por el gobierno nacional es muy difícil de cumplir cuando usted dice que son pocas las grandes bandas organizadas, entre ellas está la de Erick Alberto Parra Mendoza, alias Yeico Masacre, en el Zulia. ¿Todavía está actuando?
Si, que yo sepa, si. Es una banda que actúa tanto en Venezuela como en Colombia.
Al parecer, esa banda no tiene temor alguno, ya que incluso utiliza su propio uniforme y se identifica como Grupo Armado Yeico Masacre, utilizando su logo GAYM.
Ha imitado a los carteles mexicanos. En México algunos carteles se uniforman y en los uniformes aparecen las siglas del cartel. El grupo de Yeico Masacre ha grabado videos en los cuales aparecen sus integrantes identificados con las iniciales, para evidenciar que pertenecen a esa banda.
Pacífico Sánchez. Pregunta – ¿Existe todavía la Wilexys Acevedo, que se hizo famosa en Petare?
Luis Izquiel. Respuesta- Sí, esa banda está operativa y funciona generalmente en varias zonas del barrio José Félix Ribas, de Petare.
¿La banda Tren de Guayana, que al parecer comenzó sus operaciones en la zona urbana de Vista del Sol en San Félix y luego tomó cuerpo en El Callao, de donde sacó a otros grupos delictivos rivales, y también se extendió a Guasipati, es la más peligrosa del estado Bolívar?
También está muy activa y la lidera alias Ronny Matón. Y en Bolìvar están otras. La banda del Run o el Pelón Natera. También opera el Sindicato de Las Claritas o la del Kilómetro 18 como también es llamada esa banda.
(No lo dijo el doctor Izquiel, pero de acuerdo con los medios de Bolìvar el Sindicato de Las Claritas tiene como cabecillas a Juan Gabriel Rivas Núñez, alias Juancho; y Yohan José Romer, alias Yohan Petrica).
También —prosiguió el doctor Izquiel— en Bolìvar está el Negro Fabio en El Dorado. Igualmente hay otra banda en Bolìvar, la Organización R u OR en las minas del municipio de Sifontes. Esa ya la mencioné y le dicen el Run, por el apodo de su cabecilla, pero también la llaman de distintas formas.
¿Qué ha pasado con la banda de Deiber Johan González, alias Carlos Capa, en los valles del Tuy?
Esa fue muy golpeada porque Carlos Capa fue abatido en marzo de este año. Cuando desaparece el que encabeza una banda, asume la conducción otro miembro de la banda.
Existe el Frente Acacio Medina, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas o FARC que al no acogerse al acuerdo de paz con el gobierno de Bogotá se encuentra en Venezuela, pero opera como una banda delictiva más.
Aquí hay varios frentes de las FARC y del ELN, sobre todo en los estados fronterizos. Ese es otro elemento del crimen organizado que hay en el país. Pero, aparte de estas bandas que son las más conocidas y son consideradas bandas del crimen organizado, existen muchísimas, quizás miles de bandas delictivas, ya de menor tamaño y que no están organizadas en los términos doctrinarios en lo que es considerado una organización criminal. Son muchísimas y pululan en los barrios, pueblos y caseríos. Es por ello que anunciar acabar en forma total de las bandas delictivas en Venezuela es una oferta no posible de cumplimiento.
Doctor Izquiel, ¿es verdad que el Ejército de Liberación Nacional, de Colombia y con mucho tiempo operando en nuestro territorio, tiene gente armada en ocho estados de Venezuela?
No tengo con exactitud el número de estados. La organización InSight Crime ha hecho estudios sobre el número de individuos armados, y también Transparencia Venezuela; pero, a mi no me constan esas cifras. Lo que sì es cierto es que reportes de víctimas y de gente que vive en los estados fronterizos señalan que en Apure, Zulia, Táchira y Amazonas, hay presencia de grupos colombianos con varios frentes de las FARC y del ELN, y probablemente estos grupos estén operando en otros estados fronterizos.
El caso más llamativo de la delincuencia es el Tren de Aragua que, según los medios, se ha expandido hacia otros países. ¿Es cierto que tiene 4 mil hombres?
Se calcula que puede tener cuatro mil hombres, pero el problema con esa banda es que ya se internacionalizó y, entonces, habría que contabilizar todos los miembros que están en distintos países latinoamericanos y en los Estados Unidos. La dificultad para contabilizar a los miembros del Tren de Aragua es que, probablemente, no todos los que se autodenominan como miembros del grupo o no todos los que la prensa o las autoridades o sistemas de justicia de países latinoamericanos y de los Estados Unidos señalan como integrantes del Tren de Aragua, no lo son. Me explico: Muchos delincuentes venezolanos van a Chile, Colombia, Perú, México u otro país, y se autodenominan como pertenecientes al Tren de Aragua cuando a lo mejor no tienen vínculos con esa agrupación; pero, lo hacen muchas veces para infundir miedo a las víctimas y a los rivales delictivos; es decir, para agarrar, lo que se dice coloquialmente, “jerarquía criminal.”
Pero, ¿esa banda está activa en Venezuela?
El gobierno dice que no. Pero, ¿qué pasa? El líder de esa banda, El Niño Guerrero, está huyendo y se desconoce su paradero. Y otros miembros de esa banda, como alias “Santanita”, que es de Lara, también anda huyendo y se ignora su paradero. Entonces, hasta que esos delincuentes no sean capturados, no se puede hablar, a mi entender, de una desarticulación total de la banda dentro del territorio venezolano., Y, además, habría que ver si el barrio San Vicente, que es el feudo criminal o lo era del Tren de Aragua, sigue operando o no sigue operando allí y en otras partes del estado Aragua.
Pero, aparte del Tren de Aragua, está el Tren del Llano, que opera en varias poblaciones del estado Guárico, azotando a los ganaderos y, en general, a todo el mundo.
¿Son secuestradores?
Generalmente, hacen extorsiones. Ese es su delito principal, pero a los que no pagan, los matan.
Doctor, ¿Esas zonas de paz, que fueron creadas en el 2013 por el gobierno, todavía se mantienen?
Las zonas de paz nunca fueron un programa oficial. Las mismas fueron creadas por el alcalde José Vicente Rangel Ávalos, pero como tampoco fue oficial también se desconoce si eso tuvo una culminación, porque como no hubo un comienzo oficial tampoco hubo un final oficial. Pareciera que eso está obsoleto, no debería estar operando, pero yo no lo puedo afirmar, ni negar.
Aunque existe la ley desarme, ¿Cómo se puede explicar que haya gente armada por todas partes?
Aquí hubo muchas iniciativas en el pasado de desarme voluntario y forzoso, pero ninguna de ellas tuvo éxito, porque sigue habiendo muchísimas armas en la calle sin control del Estado, sin que estén registradas y sin que se tenga alguna supervisión real sobre ellas. Y son las armas que utilizan los grupos organizados, las bandas criminales, los delincuentes en general, para atentar contra la población indefensa.
¿No decía esa ley que las armas tenían que estar bajo el control de las fuerzas armadas?
Si, correcto, por la DAEX, Dirección de Armas y Explosivos de las Fuerzas Armadas. Ese organismo existe. El problema es que los portes de armas, en teoría están suspendidos; pero, hay gente que tiene portes de armas, me imagino que son oficiales, que los da DAEX. El problema no es del porte lícito, sino de las que están sin control por parte del Estado, que son portadas y utilizadas de forma ilegal. Son las armas que utilizan los delincuentes.
¿Qué de cierto tiene el comentario generalizado que están los delincuentes con mejores armas de potencia que el gobierno?
Del gobierno en general, no. El gobierno tiene control de las fuerzas armadas, de los grupos especiales, de la policía. Ahora, de algunas policías municipales y estadales, si, porque cuando se enfrentan a grupos criminales organizados se ven en desventaja. Pero, no el Estado en general.
Volviendo al caso de las megabandas, ¿éstas se han fortalecido en los últimos diez años?
Esas bandas tienen mucho tiempo. Realmente, la teoría criminal habla de grupos de crimen organizado y aquí se les denomina megabandas. Ahora que se ha anunciado acabar con las bandas criminales en el 2025, aquí se ha venido pregonando la realización de muchos planes con el propósito de establecer la seguridad. Ya usted ha dicho que son pocas las grandes bandas con muchísimos integrantes y muchísimas las bandas delictivas con pocos miembros.
¿Cuántos programas se han efectuado en el país para acabarlas?
Alrededor de veinte.
¿Ninguno ha dado resultados?
Desde hace unos cinco años ha habido una reducción de la criminalidad, pero a mi entender no se debe a un plan gubernamental ni a políticas gubernamentales, Se debe, principalmente, a la migración masiva de venezolanos y sobre todo a esta última oleada de migración que está concentrada en los jóvenes, varones, de los barrios y pueblos del país.
¿Por qué?
Porque en esa población de jóvenes estaba concentrado el grueso de las víctimas y victimarios de los homicidios. Al irse masivamente de paìs esa población, que era víctima de homicidas, ha disminuido enormemente la violencia. Eso explica la disminución de los homicidios en los últimos años. Entonces, a mi entender, la disminución de homicidios no se debe a la efectividad de ningún plan de seguridad, sino a la salida de jòvenes, entre los cuales se han colado minoritariamente, pero es una realidad, elementos delictivos que operaban en Venezuela y ahora andan actuando en países e Latihnoamèrica y de Estados Unidos.
¿Qué le parece lo dicho por Donald Trump, electo para presidir Estados Unidos, que a su país han llegado una gran cantidad de delincuentes venezolanos?
La Realidad es que venezolanos, que estaban en Latinoamérica, se han ido a los Estados Unidos. En esa gran masa se cuelan los delincuentes, presuntos individuos relacionados con el Tren de Aragua, capturados en Chicago, Texas, Nueva York, Georgia, Florida y otras partes de Estados Unidos. En conclusión, en el aspecto de la delincuencia, ésta ha disminuido, pero se mantiene todavía con índices preocupantes.
El tema de los homicidios en Venezuela ha disminuido en los últimos cinco o seis años, así como otros delitos. Sin embargo, las tasas de muertes violentas que tiene hoy nuestro país, según el Observatorio Venezolano de Violencia, que es una ONG que se dedica a medir esa situación, es superior a países vecinos considerados anteriormente como muy violentos. Los ejemplos más interesantes son Colombia, Brasil y México. Veníamos de muy arriba, ha disminuido, pero seguimos con una alta tasa criminal.
Concretamente, los porcentajes de homicidios por cada cien mil personas indica que Colombia tuvo el año pasado 25, 7 por ciento; México, 24 por ciento; Brasil, 18,7 por ciento y Venezuela, 26,8 por ciento. Y El Salvador, sólo 2, 4 por ciento.
Pacífico Sánchez – El Impulso