La ambición de describir sin tapujos el mundo de hoy, por Cristina García Molina

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Cristina Garcia Molina convierte una escuela de barracones, en un suburbio, que recibe a niños inmigrantes, en la representación de un mundo sin esperanza

Ha escrito uno de los libros más destacados del año y estos días la encontrarán en muchas listas. ¿Quién es esta autora? Profesora de Lengua y Literatura en Girona y también en la Escola d’Escriptura de l’Ateneu Barcelonès, no había publicado mucho hasta ahora: un libro de cuentos, un libro para niños, unos cuentos más en una revista digital. Lo que convierte en remarcable Els irredempts es la ambición de describir sin tapujos el mundo de hoy, la vocación culturalista (no como una seta decorativa sino como la floración de un micelio: una red reticular bajo nuestros pies). Desde el punto de vista del estilo trabaja para encontrar una manera propia de decir las cosas, entre la prosa y la poesía, con elementos que remiten a la libertad del teatro contemporáneo. Si miramos la estructura, está construida a partir de la idea del tríptico pictórico. No hay temas nuevos en este mundo, pero Garcia Molina encuentra la manera de tratar los viejos temas (el vigilante poético del museo que observa a la gente de la sala) con novedad.

En la primera historia he subrayado algunas soluciones lingüísticas que no acaban de convencerme. El solar –ay– se ubica en lugar de estar situat , los personajes mossegarien la pols (de morder el polvo) y aparece una colobra donde, personalmente, hubiera preferido encontrar un escurçó o una serp . Es una lengua que tira hacia el concepto abstracto, a veces un poco rígida, con frases que son versos contundentes: “Viure cap endins està bé. Però ell va començar a cicatritzar-se ”, “No pots dir al passat què ha de fer ”, “És melancòlica. És la veu d’un cantant mort en un accident .”

Lo que convierte en remarcable ‘Els irredempts’ es la ambición de describir sin tapujos el mundo de hoy

De las tres historias, esta primera, Solar, que es la más digamos realista (aunque el libro se mueve siempre entre la realidad, el delirio y la enfermedad, y tiene un fuerte componente simbólico) sobresale en muchos aspectos. En primer lugar, el clima: Cristina Garcia Molina convierte una escuela de barracones, que acoge a niños inmigrantes, en la representación de un mundo sin esperanza. Los maestros destinados allí luchan contra la falta de futuro, el desánimo, la sensación que el espacio urbano periférico entra dentro de la gente y la consume. Consume a los niños que hacen peste “d’infància negligida, de sequera, de gana, de guerra, de carrer, d’ablació, de divergència, de pèrdua, de precarietat, d’analfabetisme, de retard, de fondalades, de lleis d’estrangeria”. Y consume a los maestros con su “olor de prosperitat, de pisos cèntrics, de sopars amb amics, d’angoixes buides, de falsos sentiments de pertinença, de Stravinsky”.

Mediante piezas cortas, nada convencionales, Garcia Molina describe como alumnos y profesores se hunden en la apatía y en la resignación. Una chica excepcional en el grupo, Ípsilon, ve la gente del exterior en los rombos de la alambrada. “Volíem fer-nos justos sota paràmetres injustos” dispara contra el sistema social y educativo la narradora. La manera como se pudre el lenguaje, la amenaza de una ley superior que desmantela el colegio robando el material para llevarlo a un centro con mejor ratio. García Molina pasa del mundo exterior al mundo interior, de la realidad concreta al universo filosófico y simbólico, de la historia vivida a la historia sabida (el asesinato de Pier Paolo Pasolini es una referencia de este primer texto y del que cierra el libro). Es espléndido. Y encuentra un eco adecuado en las otras piezas del tríptico: educación, familia y cultura. El afán de romper con la abulia, la soledad, la incomunicación, la inteligencia como obstáculo para una vida conformada, la creación como un grito desesperado, el miedo a la regresión, la enfermedad que lleva a la ruptura de la relación con los demás, unen las tres partes. “La barbàrie comença en un mateix”.

 

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