El líder del movimiento de jubilados también es dirigente del gremio magisterial, Edgar Silva es con ese doble rol siempre está en la calle defendiendo los derechos que la Constitución garantiza a los trabajadores, activos y jubilados.
Es lacerante-dice-ver como maestros y profesores que dieron toda su vida al servicio de la enseñanza ahora estén en situación de mendicidad debido al incumplimiento del Estado Venezolano en materia salarial y de seguridad social. Es humillante ver a educadores de la tercera edad en condición de abandono cuando se merecen vivir sus años dorados en un ambiente de paz y estabilidad económica. Pero ante esta calamidad colectiva todo el gremio magisterial salió a la calle para demostrar que sigue con la frente en alto y con valentía convirtió los escenarios públicos en aulas abiertas donde imparten clases de dignidad ciudadana. Reclamando lo que en justicia les corresponde.
Edgar Silva es uno de los puntales a nivel nacional en la lucha por los derechos Humanos y su participación en el Movimiento DECODE es presencia que legitima el esfuerzo conjunto y compartido de todos quienes integran esta causa en defensa de la Constitución y la Democracia, dentro de la cual el exigir la satisfacción de los reclamos de los pensionados y de los educadores es punto prioritario en su agenda de actividades.
Resalta además el profesor Edgar Silva que muchos educadores para cumplir con sus responsabilidades escolares realizan otro trabajo ya que con su sueldo es imposible mantener a su familia y asistir a los centros educativos. “Quiere decir -afirma- que con trabajos extras están financiando el poder dar clases a sus alumnos, así tenemos que no es solamente que aman su trabajo sino que ellos mismos de su bolsillo están subsidiando al sistema educativo ante los incumplimientos del gobierno. Eso es inaudito, es el único caso conocido en el mundo, que unos maestros busquen trabajo extra para poder dar clases. Así son los educadores venezolanos y su protesta en la calle no es porque no quieran dar clases, es exactamente todo lo contrario, se han movilizado para poder cumplirle al pueblo venezolano en el trabajo que aman, preparar a las nuevas generaciones para el futuro de progreso que se merece Venezuela”.
La clase de hoy la damos en la calle
A casi 40 grados a Ángela Ortega, de 39 años de edad y con 14 años de experiencia en el área educativa, debe ir a cosechar cebolla, tomate, ajíes o maíz, en el asentamiento campesino Ruiz Pineda, ubicado en Barbacoas, en el sur del estado Aragua.
Ortega trabaja en la escuela rural José Rafael Carballo, ubicada en el sector El Progreso de Barbacoas, pero los casi 13 dólares que gana al mes no le alcanzan para mantener a sus dos hijos. (Efecto Cocuyo, 05-02-23).
EL testimonio de la duplicación de las actividades laborales de la Maestra Ángela Ortega es el mismo de la mayoría de los trabajadores de la educación de Venezuela, por cuanto la paga por parte del actual Ministerio de Educación es absolutamente insuficiente para atender, fundamentalmente, las necesidades básicas del educador y su familia.
Ha sido una característica malévola de este gobierno desde el 2013, el de mantener suprimidos los salarios, las pensiones y las jubilaciones de todos los trabajadores del sector público, como punto clave de un paquete antilaboral dirigido a contener el proceso hiperinflacionario que azota al país, con mayor fuerza desde el 2017, el cual pretende frenar siguiendo los lineamientos del FMI, sin resultado alguno, por cuanto cada pírrico aumento que hace del salario mínimo, a los pocos días es devorado por ese perverso flagelo. Si no hay control de la inflación no hay aumento de salario que valga, lo cual se ha tornado en un círculo vicioso permanente.
Por otro lado, recorta innumerables beneficios conquistados por los trabajadores en diferentes momentos de luchas mediante las contrataciones colectivas, como ha sido el caso de la aplicación del Instructivo Onapre, mecanismo arbitrario que fue enfrentado masiva y fuertemente por los trabajadores activos ,pensionados y jubilados a partir de junio del 2022.
En agosto del año pasado, el gobierno intentó no pagar a los trabajadores de la educación activos el bono vacacional y a los jubilados el bono recreacional, lo cual motivó las protestas masivas y contundentes del sector educativo, obligando al patrono-gobierno a cumplir con dichos beneficios contractuales.
Las luchas de los trabajadores no han cesado desde entonces.
Numerosas han sido las acciones de calle realizadas el año pasado, iniciadas el 09 de marzo del 2022 cuando, luego de un llamamiento colectivo y unitario, los pensionados de Venezuela decidieron salir a la calle a luchar por un ingreso justo que les permita vivir con bienestar y calidad de vida, al cual se unieron masivamente los trabajadores activos y la sociedad civil.
Esa histórica movilización, que nació del desespero, como lo calificó nuestro amigo periodista y agudo analista político y social, Jorge Euclides Ramirez, hizo entrega al IVSS de un pliego de peticiones que aún no han respondido, entre las cuales resalta el incremento del salario mínimo y las pensiones según el artículo 91 de la Constitución y obligó al gobierno a adelantar el incremento del salario mínimo que tenía previsto para el 1ro. de mayo, el 15 de marzo, a 130 Bs, equivalentes a 30 $ mensuales y a 1 $ diario para la época, manteniendo en pobreza extrema al sector de trabajadores activos, pensionados y jubilados.
Este pírrico incremento fue perdiendo progresivamente su poco valor adquisitivo, al mismo tiempo que fue aumentando el descontento entre los trabajadores dado el torbellino de necesidades diarias que atender con un ingreso cada vez menor, ubicándose en 5.15 $ este 06 de febrero del 2023.
Luego del receso de los días de navidad y año nuevo, el 2023 se inicia con una gran movilización nacional de trabajadores el 09 de enero, tomando la vanguardia los trabajadores de la educación, por la firma del III Contrato Colectivo Único y Unitario del sector, el cual ampara a los docentes, empleados administrativos y obreros, quienes tenían la expectativa de la firma para el mes de diciembre del 2022, después de 1 año de discusión sin que el gobierno haya presentado hasta la fecha las propuestas económicas.
En las protestas diarias que realizan en todas los estados, las ciudades y pueblos de Venezuela los autoconvocados como se han dado en llamar, la creatividad se ha puesto de manifiesto en cuanto a diferentes tipos de acciones, en consignas entonadas a voz de cuello o escritas en pancartas, franelas, papel boom, etc., creación de canciones y poemas alusivas a la lucha, videos y mensajes que ruedan por las redes sociales etc.
También se ha puesto de manifiesto un mayor sentido de unificación de diversos sectores laborales en esta lucha. Se han unido los trabajadores de la salud, los pensionados y jubilados, los trabajadores de las gobernaciones y alcaldías, los de la electricidad, de la empresa privada, de las empresas básicas y de diversos ministerios e institutos autónomos de la administración pública.
Debemos destacar el importantísimo apoyo de los padres y representantes, quienes se han opuesto a la pretensión del gobierno de sustituir a los docentes por sus acólitos de la chamba juvenil, de los milicianos y por cualquier adulador de oficio o mantenido que estén en su aparato de rompehuelgas!
Se impone seguir haciendo mayores esfuerzos para una unificación más amplia, hasta lograr el máximo propósito que hemos venido pregonando desde hace tiempo de hacer todas las luchas, una sola lucha! Y hacia este objetivo debemos trascender en esta contienda, hasta lograr un aumento general de sueldos y salarios para todos los trabajadores activos, pensionados y jubilados de la administración pública y su revisión periódica a corto plazo para el ajuste que haya que realizar, de ser necesario, como parece que lo va a ser por la pérdida del poder adquisitivo de los ingresos! El problema de los bajos ingresos afectan a todos los trabajadores.
Finalmente, esperamos que si el magisterio logra que el gobierno firme su Contratación Colectiva, se mantenga firme en la lucha, acompañando a los demás sectores que seguirán en la calle exigiendo el cumplimiento del artículo 91 y demás artículos de la Constitución que protegen el derecho a un trabajo digno, a la salud, a la seguridad social y al disfrute de salarios, pensiones y jubilaciones que garanticen una vida con bienestar y calidad, en paz y en democracia!
El gobierno juega al desgaste, al cansancio y a la represión selectiva de la dirigencia social que le incomoda en este conflicto, pero los trabajadores cada día suman fuerzas para seguir adelante con más energías, por cuanto están conscientes de que ya han perdido mucho con un gobierno que se autocalifica de obrerista, pero que representa todo lo contrario a lo que aspiramos los trabajadores.
Jorge Euclídes Ramírez – Julio Colmenárez – Lazaro Aranguren – El Informador
